La única empresa minera que hasta ahora había sorteado el fantasma de los ERES y trabajaba con normalidad, Hijos de Baldomero García en Laciana comienza este lunes un expediente temporal de 6 meses para su plantilla de 30 trabajadores.
La decisión de Endesa de no comprar carbón nacional ha dejado también a esta compañía minera sin posibilidad de entregar la media de 4.000 toneladas mensuales que, desde principios de año, se trasladaban a Compostilla si bien en los últimos meses apenas se ha pasado de 2.000 toneladas. La empresa HBG necesita vender entre 5.000 y 6.000 toneladas al mes para mantener su actividad por lo que la reducción del cupo y, ahora, la negativa a comprar carbón hacen inviable mantener en el tajo a los trabajadores. Desde la plantilla reconocen que la decisión no les pilla de sorpresa, aunque confiaban en seguir resistiendo.
Los 30 de la plantilla se van al ERE como también lo han hecho ya los 40 operarios de la contrata que trabaja para HBG.
Mientras, en Cerredo, empresa y comité de Astur-Leonesa mantendrá un encuentro para saber cómo se abordará el inminente corte del suministro eléctrico, cómo se gestionan las vacaciones pendientes y cómo se llevará a cabo el pago de la nómina. Los trabajadores quieren saber si la compañía pagará la mitad del mes que se ha trabajado o si pretende dejar que la plantilla se las arregle con la mitad del salario que corresponde al ERE. En los próximos días, también llegará el certificado definitivo de prejubilación para medio centenar de mineros que han llegado a la edad. Reconocen en el comité que hubiera sido un alivio contar con las prejubilación cuando a principios de año lograban vender 30.000 toneladas de carbón mensuales y esto hubiera permitido adelgazar la plantilla de forma no traumática.