Convocan tres días de huelga en la empresa Atos IT
El comité de empresa, integrado por UGT, CCOO y CGT, denuncia "el abastecimiento de capital humano cualificado a precio de saldo y los menores salarios en comparación con los de la capital del país u otras sedes"
La empresa tecnológica Atos IT, que se instaló hace 13 años en Boecillo (Valladolid) y cuya plantilla asciende a 150 trabajadores, se encuentra en huelga desde ayer 17 de octubre. La huelga se prolongará también los días 18 y 21 de octubre para pedir mejoras laborales.
Al respecto los trabajadores explicaron hoy que se produce al mismo nivel de rendimiento que en otras sede de la compañía “pero en cambio las condiciones en cuanto a salarios, horas de dedicación y beneficios sociales son escandalosamente menores”.
El comité de empresa, integrado por los sindicatos UGT, CCOO y CGT, apuntó en un comunicado que con el cambio de siglo muchas empresas tecnológicas, con sede en la capital de España, pusieron su mirada sobre el emergente parque tecnológico de Boecillo, emplazado en la provincia de Valladolid. “La estrategia de deslocalización de trabajo era una práctica que se convirtió en irresistible para los beneficios económicos de estas compañía”, recordó.
Así, los representantes de los trabajadores indicaron que los problemas se acrecientan desde hace años con “el abastecimiento de capital humano cualificado a precio de saldo, los menores salarios en comparación con los de la capital, la escasa movilidad de personal y, por si fuera poco, gran variedad de facilidades y ayudas por parte de la Junta, interesada por aquel entonces en frenar una imparable fuga de cerebros que lamentablemente se extiende hasta nuestros días”.
Así, desde el comité precisaron que en el caso de Atos IT se “trabaja para clientes tan importantes como Orange, Bankia o grupo PSA entre otros, en una planta que mantiene intacto el perfil low-cost con el que fue incorporado a la trama de sedes que la compañía tiene repartidas por el territorio nacional”. Este es el motivo por el que los trabajadores, “tras años padeciendo esta discriminación laboral”, han consensuado tres jornadas de huelga, donde según el sindicato “la plantilla exige un diálogo constructivo con la empresa, exento de discursos vacíos y respetuoso con sus reivindicaciones”.