Dos importantes empresas en la provincia de Valladolid, NANTA e INTRUM, han presentado sendos EXPEDIENTES DE REGULACIÓN DE EMPLEO, con las consecuencias indeseadas habituales en estos casos: despidos, cierres y desaparición de empleo.
NANTA, fábrica de piensos.
“La empresa ha comunicado a los delegados sindicales y a los trabajadores, la intención de concretar un ERE de extinción que afectaría a 40 trabajadores”, aseguraJuan Carlos García Serrano, el secretario del Sector Agroalimentario de UGT Fica en Castilla y León.El próximo lunes, como afirma el representante de UGT se constituirá la mesa de negociación, después de que la compañía haya trasladado a los representantes de los empleados, dos de UGT y uno de CCOO, sus intenciones.
“Se trata de Nanta que es una empresa que lleva muchos años en Tudela de Duero, desde 1968. Hasta el lunes, que se forme la mesa de negociación, habrá que esperar para ver si se producen contactos formales para negociar”, asegura nuestro entrevistado.
La historia de la fábrica de piensos que se ubica en la localidad vallisoletana de Tudela de Duero comienza en el año 1968 con la creación de una fábrica de piensos denominada COVANA, S.A. en el municipio pucelano. La marca Nanta fue registrada en febrero de 1968.Se comenzó a trabajar en la fabricación de correctores y piensos, a crear la red de distribuidores y también a tejer la red de fábricas con el fin de dar cobertura a todo el territorio.
Los empleados de Nanta están en vilo a la espera de que se abra la mesa de negociación.
Intrum plantea un ERE y despide a 166 trabajadores
Un nuevo Expediente de Regulación de Empleo afecta a los trabajadores de
Intrum en Valladolid. La multinacional sueca de servicios de gestión de
crédito y activos inmobiliarios plantea un nuevo ERE que viene a incidir en el ya ocurrido en 2018, que supuso el despido de 147 trabajadores en su anterior sede en La
Cistérniga. A nivel nacional esta reestructuración supone disminuir la
plantilla de las seis compañías del grupo un 33.62%, pasando de 2088
empleados a 1386, 702 menos. El presidente del comité
de empresas apunta que la medida es “desproporcionada” y una “sangría”
en cuanto al número de personas afectadas.
En el caso de Valladolid, son 3 empresas de la marca Intrum las que están presentes en la ciudad: Intrum Servicing Spain -antes conocida como Lindorff- con 511 trabajadores, Solvia Servicios Inmobiliarios y Aktua. De estos 515 empleados un 32.23 %, lo que supone un total de 166 personas, se ven afectadas por el nuevo ERE del conglomerado, a lo que hay que añadir otros 1500 puestos de trabajo que se podrían ver indirectamente afectados.
El pasado jueves 23 de mayo "se realizó la primera reunión acerca del expediente regulador en la que han procedido a la constitución del banco social a nivel estatal" y la empresa ha facilitado a los sindicatos “la información y las causas en las que se basan para tomar esta decisión, que son organizativas, productivas, técnicas y económicas. Es decir, las cuatro que hay para estos casos”, informa Jaime Esteban, presidente del comité de empresas a nivel provincial y miembro de CGT.
“Contamos con 30 días para estudiar la amplia documentación que nos han facilitado para justificar esta medida, ver si esas causas que alegan están justificadas por esos 4 tipos que decía y dar la argumentación pertinente. Además, desde CGT les indicaremos los motivos por los que estamos en contra de esta medida que nos parece desproporcionada en cuanto al número de personas trabajadoras afectadas”, explica.
En ambos casos los sindicatos parecen "esperar" a ver las condiciones... y sin embargo los trabajadores deberían MOVILIZARSE ya, sin esperar, contra el ERE en sí, y CONTRA LOS DESPIDOS.